Un piso de estudiantes puede ser un lugar agradable y tranquilo. En el madrileño barrio de Argüelles emprendemos una reforma integral en un edificio de principios de siglo cercana a la universidad complutense.
Es la casa donde nació nuestro cliente y tiene un gran valor sentimental, por lo que aun teniendo que equiparla con todo lo necesario para el uso de estudiantes queremos mantener la esencia de la casa, por lo respetamos la altura de los techos de 3.2m con molduras y rosetones de escayola y restauramos puertas y molduras de la época, e incluimos pulsadores de encendidos y enchufes cerámicos como los que se usaban a principios del XX.
Tratándose de un piso de 130m2 de uso compartido preferimos generar espacios grandes y luminosos donde el estudiante cuente con todas las comodidades, por lo que se generan 4 habitaciones amplias con varios usos con una zona de estar, zona de estudio, dormitorio y espacio para almacenaje, para una estancia independiente y agradable.